Expertos sugieren austeridad para enfrentar el déficit fiscal Con el paso del tiempo, se ha intensificado una crítica recurrente hacia la planificación del Presupuesto General de la Nación. Según los expertos, las proyecciones optimistas sobre los ingresos han llevado a un desajuste significativo en las finanzas del gobierno. Uno de los principales problemas es la incertidumbre en torno a los litigios de los que se esperaba recaudar más de $15 billones, cifra que luego se redujo a $10 billones y que actualmente se estima no superará los $5 billones. Además, la legislación correspondiente aún no ha sido presentada al Congreso.
Sumado a esto, el recaudo tributario hasta marzo se encuentra $5 billones por debajo de lo esperado, mientras que el gasto público sigue aumentando. Esto plantea una interrogante crítica: ¿serán suficientes los recursos actuales para cubrir las necesidades del año?
Portafolio consultó a varios expertos sobre cuánto dinero le faltaría al país si se ejecuta el Presupuesto General de la Nación tal como está proyectado. José Ignacio López, presidente de Anif, destacó la necesidad de “sincerar las cuentas fiscales”. A los desafíos ya mencionados se suma la suspensión de un fallo de la Corte Constitucional sobre la no deducibilidad de las regalías.
Según López, el gobierno podría enfrentar un déficit de entre $4 y $9 billones para alcanzar la meta de déficit fiscal del 5,3% del PIB. Para cubrir este hueco fiscal, es necesario que el gobierno recorte gastos, implemente un plan de reactivación efectivo y gestione mejor la Dian. El déficit también se atribuye a una menor dinámica de recaudo y a la planificación fallida de ingresos por litigios que no se concretarán. Ante este escenario, López sugiere que el gobierno debería recortar gastos en áreas con baja ejecución para tranquilizar a los inversionistas y cumplir con la regla fiscal.
Por su parte, Henry Amorocho, profesor de Hacienda Pública de la Universidad del Rosario, advierte sobre la disminución del recaudo de la Dian, estimada en 1,2%, y subraya la importancia de considerar el impacto de la inversión pública y privada. Amorocho señala que la baja ejecución de la inversión afecta el crecimiento económico, lo que justifica la reducción en el recaudo.
No obstante, Amorocho también menciona que el rezago en la ejecución presupuestal podría mitigar los problemas de caja. La proyección de crecimiento económico se mantiene entre el 1% y 1,1%, lo que refleja una perspectiva cautelosa pero optimista sobre la capacidad de recuperación de la economía colombiana.
Un informe reciente del Comité Autónomo de Regla Fiscal indica que el déficit fiscal comienza en los $10 billones debido a los litigios y se incrementa con el menor recaudo tributario, que actualmente asciende a $4 billones. A pesar de que los expertos insisten en la necesidad de recortar el gasto, un análisis del Banco de Bogotá revela que el gasto gubernamental sigue aumentando. El Presupuesto General de la Nación pasó de $423 billones en 2023 a $502 billones en 2024, con un incremento del 22% en los pagos de funcionamiento e inversión hasta marzo.
Estos problemas de caja podrían continuar presionando la estrategia de redención anticipada del gobierno, lo que podría llevar a una emisión acelerada de TES y a financiamientos anticipados menos transparentes.
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