Informe de la UNESCO revela que el presupuesto de educación global tiene un déficit anual de US$ 97.000 millones.

Según un informe reciente de la UNESCO el presupuesto de educación global tiene un déficit anual de US$ 97.000 millones, lo que pone en riesgo el cumplimiento de los objetivos de la Agenda 2030. El déficit presupuestario implica que millones de niños, niñas y jóvenes se quedan sin acceso a una educación de calidad, equitativa e inclusiva. Según el informe, se estima que 258 millones de niños y jóvenes no asisten a la escuela y que 617 millones no alcanzan los niveles mínimos de competencia en lectura y matemáticas. Además, el déficit afecta especialmente a las poblaciones más vulnerables y marginadas, como las niñas, los refugiados, los indígenas y las personas con discapacidad.

La escasez de maestros de preescolar, los retos de la educación digital, y los efectos de la pandemia del coronavirus. Son algunos de los puntos que destaca el informe de la UNESCO. Dichos puntos pueden verse intensificados si se continua este déficit. Este déficit implicaría una perdida de oportunidades para influir en las nuevas generaciones y hacer frente a los desafíos de un mundo cambiante.

En el informe se tocan temas que sugieren la necesidad de aumentar la ayuda internacional, mejorar la eficiencia y la equidad del gasto público, fortalecer la rendición de cuentas y la transparencia en el sector educativo.

Es necesario impulsar una transformación pedagógica y curricular que responda a las demandas y necesidades del siglo XXI. No se trata solo de aumentar el presupuesto, sino también de mejorar la calidad y las medidas de la educación.