El alto representante de la Unión Europea para asuntos diplomáticos de la UE, Josep Borrell, ha viajado a Irán para abordar la situación de los derechos humanos de las mujeres y las niñas en el país. En una declaración para los Derechos Humanos Borrell instó a Irán a eliminar la discriminación sistémica contra las mujeres y las niñas tanto en la ley como en la práctica. Asimismo, exhortó a las autoridades iraníes a adoptar medidas efectivas para prevenir y proteger contra la violencia de género en todas sus formas, incluida la violencia doméstica, el acoso sexual y otras formas de violencia de género.
Este acontecimiento se da en el marco del trágico caso de defunción de la joven iraní Jina Mahsa Amini, quien presuntamente fue víctima de las políticas de violencia de género que se promueven en Irán. Su muerte provocó una ola de protestas, que fueron reprimidas violentamente por las fuerzas de seguridad. Borrell denunció la violación de las libertades civiles y de expresión en Irán, y reclamó el respeto al derecho a manifestarse pacíficamente.
La UE y sus Estados miembros se han mostrado firmes en su apoyo al Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, al que Irán es parte. La UE defiende la libertad de expresión y la libertad de reunión como derechos fundamentales que deben ser respetados. Borrell expresó su preocupación por las duras sentencias y ejecuciones de manifestantes en Irán, y pidió que se detengan las futuras ejecuciones y se garanticen las debidas garantías procesales. También solicitó que se permita el acceso libre de los titulares de mandatos de Derechos Humanos de la ONU y que se cese la detención arbitraria de ciudadanos de la UE y doble nacionalidad europea e iraní.
Se espera una cooperación entre la UE e Irán en el ámbito de los derechos humanos, siempre y cuando se cumplan los compromisos internacionales del país, y sea mediante el diálogo constructivo.
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