Los BRICS han dado un paso histórico al anunciar la inclusión de seis naciones adicionales en su coalición, un cambio que entrará en vigor a partir de 2024. Esta elección demuestra la intención de los BRICS de consolidar su posición en el panorama global y de fomentar un orden global más equitativo y con múltiples centros de poder.
Los nuevos integrantes son Argentina, Egipto, Irán, Emiratos Árabes Unidos, Arabia Saudita y Etiopía, países con significativo potencial económico y una rica diversidad cultural. Con esta expansión, los BRICS conformarán el 37% del PIB mundial y serán el hogar del 46% de la población global, otorgándoles una mayor influencia en las decisiones de alcance internacional. Los líderes de Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica celebraron la ampliación del grupo y reafirmaron su compromiso con la colaboración recíproca y el respeto por las normativas internacionales.
El presidente chino, Xi Jinping, dijo que este era un “nuevo punto de partida” para los BRICS y que el bloque seguiría siendo una fuerza positiva para la paz y el desarrollo mundial.
Durante la conferencia, el mandatario ruso, Vladímir Putin, también emitió una llamada para proteger el enfoque multilateral en contraposición a los esfuerzos de ciertas naciones por forzar su agenda sobre el resto del mundo. Putin censuró el “colonialismo contemporáneo”, que busca aprovechar los recursos de naciones en desarrollo bajo la excusa de promover la democracia. Afirmó que los BRICS no tienen la intención de rivalizar ni confrontar, sino de colaborar de manera equitativa con todos los participantes globales. Igualmente, resaltó que los BRICS establecen relaciones de múltiples dimensiones con diversas naciones y regiones, una idea que se evidencia en la invitación a nuevos miembros.
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