Necropsia confirma que el coronel Óscar Dávila se suicidó con el arma de su conductor

La Fiscalía General de la Nación dio a conocer este miércoles los resultados de la necropsia practicada al coronel Óscar Dávila, quien murió el pasado 9 de junio en Bogotá. Según el informe forense, el oficial se suicidó con el arma de su conductor.

El coronel Óscar Dávila era el jefe de la Oficina de Anticipación de la Presidencia de la República y estaba vinculado a la investigación por el escándalo de las interceptaciones ilegales a la niñera Marelbys Meza.

El día de su muerte, el coronel Dávila salió de su casa en el norte de Bogotá hacia las 5:00 p.m. y se dirigió al occidente de la ciudad en una camioneta blindada conducida por su escolta. Según el testimonio del conductor, el oficial le pidió que se detuviera en una calle cerca al centro comercial Plaza de las Américas y le entregó su teléfono celular y su billetera. Luego, le pidió prestada su pistola y le dijo que iba a hacer una llamada.

El conductor se bajó del vehículo y se alejó unos metros para darle privacidad al coronel. Sin embargo, segundos después escuchó un disparo y corrió hacia la camioneta. Allí encontró al coronel Dávila con un impacto de bala en la cabeza y el arma en su mano derecha. De inmediato llamó a las autoridades y a los servicios médicos, pero el oficial ya había fallecido.

La Fiscalía General designó un equipo interdisciplinario de 25 expertos que se encargaron de definir los detalles de la investigación. Se practicó el protocolo de Minnesota y la necropsia al cuerpo del oficial. El protocolo de Minnesota es un método forense que busca establecer si el cuerpo presentó golpes o heridas provocadas antes del deceso.

La necropsia practicada por doce expertos forenses del Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses confirmó que el coronel Dávila se suicidó con el arma que era de su conductor. Estos son algunos de los hallazgos que se presentaron:

  • El disparo se realizó a una distancia menor a 10 centímetros entre el cañón del arma y la piel.
  • El disparo ingresó por el lado derecho del cráneo, a nivel del lóbulo temporal, y salió por el lado izquierdo, a nivel del lóbulo parietal.
  • El disparo produjo una fractura craneal conminuta (en varios fragmentos) y una lesión cerebral severa.
  • El disparo causó una hemorragia interna y externa masiva, que provocó un shock hipovolémico (pérdida de sangre) y la muerte instantánea.
  • Se encontraron rastros de pólvora en la mano derecha y el puño de la camisa del oficial, lo que indica que él mismo accionó el arma.
  • Se hallaron residuos metálicos en las heridas de entrada y salida del proyectil, lo que confirma que se usó una munición convencional.
  • Se detectó un medicamento antidepresivo en el organismo del oficial, lo que sugiere que padecía algún trastorno psiquiátrico.

El cuerpo del coronel Dávila no tenía ningún signo de riña, lucha, sujeción o indefensión. Por el contrario, según las pruebas, él mismo empuñó el arma con la que se disparó.

La vicefiscal general Martha Yaneth Mancera afirmó que para la Fiscalía General este caso está resuelto y los fiscales a cargo del caso cerrarán el caso.

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