Según el Programa de Observación de la Tierra de la Unión Europea, el año 2023 se perfila como el más cálido de la historia desde que se tienen registros.
Los datos revelan que la temperatura media global entre enero y noviembre ha sido 1,46 grados superior a la del periodo preindustrial y 0,13 grados mayor que la de 2016, el año más cálido hasta el momento.
Asimismo, el otoño boreal y el mes de noviembre han batido récords de temperatura tanto en la superficie terrestre como en los océanos. Estos hechos ponen de manifiesto los efectos del cambio climático causado por el incremento de los gases de efecto invernadero en la atmósfera.
Samantha Burgess, vicedirectora del Servicio de Cambio Climático de Copernicus, ha advertido de que “mientras las concentraciones de gases de efecto invernadero continúen aumentando no podemos esperar unos resultados distintos a los observados este año”.
Se ha declarado el director de C3S, Carlo Buontempo. “La temperatura seguirá subiendo y con ella los efectos de las olas de calor y las sequías. Lograr el cero neto lo antes posible es una forma eficaz de gestionar nuestros riesgos climáticos”, ha añadido.