Hace algunas horas el presidente Gustavo Petro, mediante la red social X, dio a conocer que se instalará una sesión permanente de trabajo de 100 horas, con el fin de buscar un consenso frente a una reforma a la salud que pueda salvar la salud de los colombianos.
El presidente señala “Hemos acordado con las EPS una sesión permanente de trabajo de 100 horas, partiendo de una base y es que se necesita reforma a la salud. Este espacio será de concertación para buscar una salida a la crisis que durante décadas se ha llevado al sistema de salud. Una salud incluyente y preventiva es el camino”.
Esta decisión cambia el panorama en torno a la discusión sobre los recientes hechos que rodeaban al sistema de salud, que se venía agudizando desde hace mucho tiempo, pero que tiene su punto de quiebre con el hundimiento de la reforma a la salud y las intervenciones de la superintendencia a las EPS.
En recientes entrevistas, el presidente Petro señala “Debí haber intervenido hace varios meses. Los indicadores ya lo ameritaban, las normas ya se habían infringido. Esperé al Congreso y esperé un tránsito suave”.
Sin duda alguna, este acuerdo entre Gobierno y EPS es un paso necesario para poder buscar soluciones a un sistema de salud que ha respondido en cobertura, pero no en otros aspectos fundamentales, como en calidad de la atención y que se ha quedado debelado ante el innumerable número de tutelas para que el derecho fundamental a la salud sea garantizado.
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