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Siempre realizar cambios en tu vida va a ser parte de un gran desafío. Desde cambiar de vivienda, hasta cambiar de crema dental parece una decisión trascendental en ella. Sin embargo, somos seres en constante movimiento, en donde la superación y el desafío son parte integral de la existencia. Adaptarse a un entorno siempre es favorable, pero corres el riesgo de convertirse en monotonía.
Para nuestros padres, estudiar en el extranjero era una oportunidad imposible debido a los costos de los viajes, y sobre todo, a la poca información de la que disponían. Hacer realidad la misión de salir del país para mejorar sus estudios universitarios era impensable. Hoy en día, hablar de estudiar en el extranjero es una realidad que cada día toma más fuerza. Esta experiencia puede resultar extremadamente enriquecedora tanto académica como personalmente.
Son muchas las razones las que nos pueden llevar a tomar esta decisión. Los costos en las especializaciones en nuestro país, la búsqueda de prestigio en otras universidades o simplemente la curiosidad de encontrar nuevas experiencias en otros ambientes son los primeros motores e impulsan esa curiosidad de buscar un programa afuera de Colombia. Empiezan esas preguntas, ¿Dónde busco? ¿Qué país es mejor? ¿Cómo asumiré los costos de vivienda y alimentación? ¿Necesito hablar inglés para mi universidad? ¿Volveré alguna vez?. Todas son preguntas válidas, sin embargo, comprender que muchas dé estas respuestas las conocerás cuando ya estés en el lugar, es la etapa más difícil de comprender.
La primera vez que llegas a una ciudad diferente, con paisajes diferentes, con gente desconocida, sin amigos y con el miedo a encajar, solo puede compararse al miedo en el supermercado cuando tu madre te dejaba solo a los 5 años. No obstante, ese miedo va pasando, vas conociendo personas, haces amigos de lugares del mundo que no imaginabas conocer y tu curiosidad por conocer más va creciendo. No es fácil, para nadie es fácil, sobre todo si nunca hemos salido de la zona de confort en la que vivimos a diario, sin embargo, tener presente que esa experiencia te va a ser mejor persona y profesional es el pilar fundamental para continuar.
Con el tiempo, te vas dando cuenta que es una experiencia completamente gratificante. Desarrollarás habilidades de adaptación, independencia, aprenderás a hacer amigos, idiomas y verás ese éxito profesional más cerca de lo que crees. Esa ciudad que alguna vez fue extraña para ti, se va convirtiendo en tu hogar, conoces personas en tu misma situación e intentas ayudarlos a superar las etapas más difíciles y aprendes a disfrutar completamente lo que estás viviendo.
Siempre vas a extrañar a tu familia, a tus amigos y a tu pareja, sin embargo, puedes encontrar en ellos el motor para continuar afrontando los retos que presenta este gran desafío. Estudiar en el exterior está al alcance de tu mano, no es fácil, pero una vez alguien dijo “quien no se arriesga piensa en lo que puede perder, pero nunca en lo que puede ganar”.
Agradecemos a la Revista Juventud por este espacio, desde el equipo de Integralo Soluciones SAS.
Una nota de cristal, de Pablo Castro, máster en Derecho, Empresa y Justicia, de la Universidad de Valencia, España.
Notas De Cristal Para Una Generación En Construcción.
