En un movimiento que podría alterar el panorama de la atención médica en Colombia, el Ministerio de Salud ha dado un paso decisivo al firmar un decreto que allana el camino para el giro directo de fondos a las Instituciones Prestadoras de Servicios de Salud (IPS), excluyendo a las Entidades Promotoras de Salud (EPS) como intermediarias.
Este cambio radical en la infraestructura de pagos busca mejorar la eficiencia del sistema, permitiendo que el Estado remunere directamente a las IPS, tales como clínicas y hospitales, eliminando las demoras y la burocracia asociadas con los pagos a través de las EPS. El Ministro de Salud, Guillermo Alfonso Jaramillo, destacó la importancia de esta medida al afirmar que “el giro directo es crucial para mantener la salud financiera de las IPS, lo que a su vez garantiza una mejor atención para los pacientes”.
El decreto también tiene como objetivo facilitar la movilidad de los usuarios del sistema de salud, permitiendo transiciones más fluidas entre los regímenes contributivo y subsidiado. Esto es especialmente relevante en situaciones como la pérdida de empleo o cambios en la situación laboral de los afiliados, donde la continuidad en la atención médica es vital.
Además de estos cambios fundamentales, el Gobierno tiene planes ambiciosos para fortalecer aún más el sistema de salud colombiano. Se ha establecido una meta de cubrir aproximadamente el 62% de los pagos en los próximos tres meses, lo que representa un avance significativo en la optimización del sistema de salud del país.
Además del giro directo, se están preparando una serie de medidas adicionales para mejorar la atención médica en todo el país. Estas incluyen la reactivación de promotores de salud para áreas remotas, la actualización del manual tarifario, la territorialización de afiliados a las EPS y la creación de nuevas redes de atención médica. Estas iniciativas, en conjunto, prometen fortalecer la atención médica y garantizar un acceso más equitativo a los servicios de salud en todas las regiones de Colombia. Con un plan de implementación gradual, se espera que el nuevo sistema esté completamente operativo en un plazo de tres meses, lo que marca un hito en el camino hacia un sistema de salud más eficiente y accesible para todos los colombianos.
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