El presidente de Colombia, en un mensaje en redes sociales, ha alertado sobre el inminente fracaso de la reforma pensional debido al tiempo perdido deliberadamente en el debate parlamentario. Según el mandatario, el país enfrenta uno de los peores sistemas pensionales del mundo, y es crucial que el Congreso respalde la iniciativa.
El foco del debate se ha centrado en el pilar fundamental de la reforma: el nivel salarial a partir del cual los trabajadores pueden cotizar en fondos privados. Mientras el gobierno propone cuatro salarios mínimos, hay propuestas para establecer este límite en un salario mínimo. Esta discrepancia determinaría la cantidad de personas que podrían beneficiarse de un bono pensional financiado por el Estado.
El presidente advierte sobre la influencia de los intereses bancarios en la discusión, destacando que una propuesta para permitir que los fondos privados ganen comisiones tanto por la administración de flujos anuales como por el acumulado podría hundir la reforma.
El actual sistema de fondos privados, según el presidente, no garantiza una pensión para la mayoría de los cotizantes, lo que ha llevado a cientos de miles de trabajadores a migrar a Colpensiones, que ofrece una mayor seguridad en la jubilación.
De no aprobarse la reforma, se teme que los fondos privados enfrenten una crisis inminente, ya que más trabajadores podrían migrar a Colpensiones, no solo con sus cotizaciones sino también con el acumulado de sus ahorros.
El gobierno propone un sistema de pilares donde los sistemas actuales no compitan, sino que se complementen, pero el tiempo para lograr un consenso se agota, y el futuro de la reforma pensional en Colombia pende de un hilo en el Congreso.
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