Frente al proyecto de “paz total” que plantea el actual presidente Gustavo Petro se cuestiona el papel que los medios de comunicación y en especial la revista “JUVENTUD” van a interpretar en este prometedor cambio social.
La paz total del presidente nos muestra desde diferentes iniciativas la intención de devolverle dignidad y una futura tranquilidad a las personas, en cuanto al tema de conflicto armado se habla; Sin importar su actividad en la sociedad, pues el respeto de la dignidad de los que alguna vez fueron violentados, se termina convirtiendo indirectamente en el respeto hacia los que incluso alientan actos de violencia contra la dignidad. Una muestra de esto es el mero acto de escuchar a la “oposición inteligente” mientras sugieren no retomar los acuerdos de paz con los grupos armados ilegales, presentando el mismo sonsonete mediante el cual muestran su deseo por la continuación de un ciclo de violencia, pidiendo que se le dispare a todo el mundo como si fueran caudillos.
Esta sociedad cimentada desde un común acuerdo de igualdad sugiere que en materia de derechos humanos no se pueden priorizar unos sobre otros, y en este aspecto la propuesta de Petro fortalece ese concepto. Si bien es cierto, este proyecto presenta múltiples trasfondos que discutir, pero un aspecto que toma mayor relevancia considerando lo globalizada que está la sociedad, es la difusión de información hecha por los medios tradicionales/comerciales.
Entre medios conformados por personas con nóminas paralelas, medios cansados de ver jefes de disidencias, resucitar, y otros presuntamente involucrados en uno de los mayores actos de corrupción como lo es la desaparición de bienes incautados del narcotráfico.
Ante este y otros pronósticos que tendrán un fuerte impacto en Colombia, se nos presenta una coyuntura en la difusión de información. Es por esto que el papel que juegan los medios independientes ante este proyecto de “Paz total” es el de los “tontos útiles”.
Revista Juventud fundada con el propósito de visibilizar los diferentes puntos de vista que presentan los colombianos, hace parte de estos “tontos útiles” que existen y seguirán existiendo con el único propósito de visibilizar la realidad colombiana sin favoritismos, sin ser pagados por algún partido político, y ese es el principal rol de los medios de comunicación independientes.
El papel de los medios de comunicación en una sociedad que se encuentra en constante cambio frente a las adversidades, se hace cada vez más evidente, no solo como una fuente de información, sino también como una base sobre la cual tener una noción de la realidad actual, y de las tendencias a las que se dirige la ciudadanía. En medio de los múltiples casos de corrupción que poco a poco salpican a los medios de comunicación tradicionales, los medios independientes se afianzan más como una fuente de información más confiable, y enfocada en mostrar una realidad social más cruda.
El fin último de los tontos útiles es ponerse en la línea de fuego todos los días, cuestionando cada acción, proyecto, y ley que se lleve a cabo en el país, y velando por los derechos y prospectos de la sociedad colombiana. Este ente social conformado por personas interesadas en informar y criticar los acontecimientos que ocurren en el día a día, con la esperanza de ser parte de ligeros cambios que mejoren a la sociedad progresivamente.
Una nota de cristal de: Mateo Alejandro Galindo Bustamante
