Hoy primero de mayo, día internacional del proletario (trabajador) mientras el mundo conmemora la lucha histórica por los derechos laborales, el mundo se encuentra frente a una encrucijada moderna que exige una reflexión profunda y una acción decisiva por parte de cada uno de los gobiernos. En medio de la celebración de los logros del movimiento obrero, también es importante reconocer los desafíos actuales que enfrentan los colaboradores en un entorno laboral cada vez más complejo y dinámico y donde el empleador piensa en cómo obtener la plusvalía obviando muchas veces el bienestar del colaborador.
En este momento, más que nunca, es crucial reconocer que la reforma laboral no es solo una opción deseable, sino un imperativo moral y económico. La pandemia ha puesto al descubierto las vulnerabilidades de nuestro sistema laboral, desde la precariedad de los empleos hasta la falta de protección social adecuada, por lo tanto el mundo y cada uno de sus gobernantes debe abordar estas deficiencias de manera integral y urgente.
Teniendo en cuenta lo mencionado con anterioridad en Colombia se dio un gran paso en este aspecto, en el año 2023 se aprobaron 16 de los 98 artículos de la reforma laboral, claramente esta reforma está pensada en la clase obrera, devolviendo derechos que se habían perdido por gobernantes intransigentes y que solo buscaban favorecer a las clases poderosas del país.
En el 2002, mediante la ley 789 el “expresidario” Álvaro Uribe Vélez aumento la duración de la jornada diurna, lo que se traduce como la reducción de la jornada nocturna, esta antes iniciaba a la 6:00 p.m. Posterior a la entrada en vigor de la ley anteriormente mencionada, el inicio de la jornada nocturna fue de las 10:00 p.m. esto beneficio a los empresarios, pues se recortó el costo respecto al recargo nocturno, quitándole así un beneficio al colaborador, de igual manera sucedió con el porcentaje destinado a los recargos dominicales y festivos, que pasaron de remunerarse con un cargo extra del 100 por ciento al 75 por ciento.
Ahora, después de la aprobación de los artículos, se podrán devolver algunos derechos a los obreros, a partir de julio del 2024.
Según el artículo 19, el trabajo en día de descanso obligatorio o días de fiesta se remunera con un recargo del 100% que será implementado de manera gradual por el empleador, para llegar a su totalidad en 2026. Por otra parte, el artículo 15 contempla que el trabajo diurno es el que se realiza entre las 6:00 a.m. y las 7:00 p.m. y el trabajo nocturno, entre las 7:00 p.m. y las 6:00 a.m. actualmente la jornada nocturna inicia a las 9:00 p.m.
Por otra parte, Colombia se encuentra en el top 20 de los países que cuenta con una jornada laboral más extensa, según la Organización Internacional del Trabajo, Colombia es el país que más horas trabaja en Latinoamérica. En promedio, el país labora 44.2 horas por semana, ocupando el primer lugar del listado, teniendo en cuenta lo anteriormente mencionado Colombia es uno de los países que menos produce, esto demuestra la hipótesis errónea de que el numero de horas y la producción son directamente proporcionales.
Estos indicios de cambio en el sistema laboral son importantes, aunque no debe ser simplemente un ajuste superficial, sino un cambio estructural que promueva la equidad, la seguridad y el progreso para todos los colaboradores. Es un llamado a repensar nuestras políticas laborales en función de los valores fundamentales de justicia y dignidad humana.
Una nnota de cristal de: Leonardo Gutiérrez, Estudiante de administración de empresas Univalle.
Notas De Cristal Para Una Generación En Construcción
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