República Dominicana toma la decisión de prohibir la entrada al país, a varios políticos haitianos, entre ellos el primer ministro interino Claude Joseph y el presidente del Senado Joseph Lambert. La medida se tomó después de que estos políticos participaran en una reunión en Santo Domingo con el secretario general de la OEA, Luis Almagro, para buscar una solución a la crisis política que vive Haití tras el asesinato del presidente Jovenel Moïse.
Algunos mandatarios clasifican esta decisión como una “falta de respeto” y una “injerencia” en los asuntos internos de Haití. El gobierno dominicano también expresó su apoyo al primer ministro designado Ariel Henry, quien fue nombrado por Moïse antes de su muerte y cuenta con el respaldo de la comunidad internacional.