Frente a la reunión número 27 de la conferencia de las Naciones Unidas sobre el cambio climático, se reflexiona acerca del cambio de rol de los actores políticos en su lucha contra la crisis climática, y como esto cambia la noción de poder en la geopolítica.
Es en este punto en el que nos preguntamos la razón de ser del panorama geopolítico. Pues en la COP27 llevada a cabo en Egipto se nos hace un llamado a reconsiderar el foco de atención en este panorama geopolítico; esto sin la intención de restarle importancia a otros conflictos que afectan a múltiples países.
El rol de los países en esta crisis no ha cambiado, pues a pesar de que la crisis ambiental nos involucre a todos, esta política del siglo XXI persigue lo mismo que se ha perseguido por siglos y es el poder, pero ahora la noción totalitarista y bélica que se tenía de este ha cambiado. El poder se encuentra indefinido, para las potencias se basa en los desarrollos acumulados, en la superioridad tecnológica, y en la cantidad de países reunidos de tu lado.
En mi opinión, el poder tiene una forma, y es distinta a la anteriormente concebida. Teniendo en cuenta que vivimos en un mundo donde el cambio ocurre más rápido que antes, podemos decir que la incertidumbre se ha vuelto algo constante desde hace ya tiempo, y es esta incertidumbre la que nos sitúa en esta sociedad de constante crisis. Crisis que van más allá de los muros que limitan un país con el otro, son los que caracterizan al panorama geopolítico actual, y es a partir de estas crisis transnacionales que la noción de poder que tienen las potencias toma forma. Deja de ser ese escenario liderado por individuos que buscan usar el desarrollo de tecnologías, para obtener mayor poder bélico con fines represivos, y pasa a ser la capacidad de convocar a la mayor cantidad de países desarrollados y no tan desarrollados, con el fin de plantear soluciones a este tipo de crisis. En esta concepción de poder del siglo XXI, la conservación y mejoramiento del medio ambiente, y la transición a energías renovables, juegan un papel central; esto no quiere decir que el poder bélico dejará de ser una moneda de cambio entre los países.
“Es la hora de la humanidad y no de los mercados” es con esta frase expresada por Petro en la COP27, que podríamos resumir el cambio de intereses que presentarán las nuevas políticas que planean enfrentarse a la crisis del cambio climático. Una nueva dirección social que busca la superación de esta crisis. Una nueva exigencia de cambio en marco geopolítico actual.
Mateo Alejandro Galindo Bustamante.
Excelente, felicitaciones